sábado, 19 de abril de 2008

Cambios de estación

Algunas veces, en los cambios de estación me salen alas o las piernas se convierten en una cola de pez o los dientes se transforman en colmillos y escribir pierde todo su sentido.

Esta vez ha reaparecido entre ornitorrincos, paquidermos, albatros, termitas, alciones, anacondas y aves de rapiña diseccionadas por R. R. en Manual de literatura para caníbales. Lo he devorado sin salir de debajo del edredón. Fuera diluviaba.

2 comentarios:

Tina Paterson dijo...

Bien, de vuelta al negocio.
Qué tanto berlusconi debía de tener frita...

Pat dijo...

...el cambio primaveral....a mi me produce catarsis también...a veces buena, a veces mala...ayyy

Besicos