“Cuando le pidas las cuerdas te responderá – son para… -, entonces respondes – sí -”
“De acuerdo, esperaré a los puntos suspensivos”, respondí saboreando una sonrisa.
Acompañada por ti, fuimos al lugar aconsejado, la espartería de Cava Baja 13. Entramos en ella y avanzamos por el pasillo de palabras indicado: “tienes cuerdas de cáñamo o yute?”.
Tras un breve silencio, el tendero nos responde con la pregunta esperada: “son para… suspender?”
Sigue leyendo en el excitante blog bdsm de Eva Versus.
En Jot Down escribieron hace meses un documentado artículo sobre el shibari. La foto es de Alberto Lisi.
0 comentarios:
Publicar un comentario