jueves, 14 de mayo de 2009

In the mood for cycling

Como no podía ser de otro modo, en Tokio las bicicletas son mucho más numerosas que los coches. Y millones de ellas circulan cada día por sus (amplias) aceras y parques, por los callejones y por el lado izquierdo de las carreteras, sin que a nadie le llame la atención.

Por descontado, nadie intenta robarlas, así que basta con apoyarlas contra una pared e inmovilizar la rueda trasera con una simple arandela.

Igualito igualito que Madrid.

Creo que se nota lo mucho que he disfrutado hoy: